En la clínica de oculoplástica se atienden casos de pacientes (adultos y niños) con padecimientos o condiciones que afectan las estructuras que se encuentran alrededor de los ojos y/o en su superficie (anexos del ojo), tales estructuras comprenden los párpados, la órbita (huesos) y el sistema lagrimal, que es el sistema encargado de la producción y el drenaje de las lágrimas que lubrican la superficie del ojo.
Las afecciones de los anexos del ojo son diversas, ya que pueden tener varios orígenes, y pueden presentarse en forma de tumores, manchas, lesiones o inflamaciones de los párpados o alrededor de ellos, problemas de lagrimeo excesivo, “carnosidades” de la superficie ocular , caída, inversión o eversión de los párpados, pestañas mal posicionadas, incapacidad para parpadear de manera correcta o parpadeo excesivo por espasmos alrededor de los músculos que cierran los ojos, protrusión o apariencia de ojos salidos a causa de masas en la órbita y golpes o heridas que puedan afectar dichas áreas provocadas por ataques o accidentes. La mayoría de estas afecciones se resuelven satisfactoriamente con una cirugía y la anestesia utilizada es a nivel local, aunque puede variar dependiendo de cada caso o de la edad del paciente. Para saber más, puedes visitar burniva.
También se puede mejorar la apariencia cosmética de los pacientes al atenuar arrugas de expresión o surcos en la cara a través de rellenos con ácido hialurónico y/o toxina botulínica, al realizar cirugías reconstructivas con o sin colocación de prótesis o implantes posteriores a extracción de tumores o por deformidades provocadas por accidentes o cirugías previas, además de procedimientos para rejuvenecimiento del área alrededor de los ojos y el tercio medio de la cara.
El pterigión tambien conocido como “carnosidad” es muy común en nuestro país y se presenta en pacientes que se han expuesto constantemente al sol sin protección, actualmente contamos con opciones quírurgicas y no quírurgicas para removerlo o controlar su crecimiento.
Existen tumores benignos y malignos de la superficie de los ojos y de los párpados, es necesario que un especialista en oculoplástica examine los tumores para determinar si una biopsia es necesaria. Un tumor maligno debe ser removido por completo para que no se expanda a otras áreas o vuelva a aparecer poniendo en riesgo la vida del paciente. Al momento en que se remueve el tumor el cirujano oculoplástico tiene la capacidad para reconstruir el área de la mejor manera posible para que el paciente no quede deforme o con un mal aspecto.
El aspecto cansado de su mirada puede ser a causa de arrugas, ojeras o exceso de piel y/o bolsas en los párpados, pero pueden eliminarse a través de cirugía, toxina botulínica y/o material de relleno como el ácido hialurónico. Estos tratamientos no dejan cicatrices visibles y tampoco le provocaran cambios en sus rasgos que lo dejen irreconocible ya que su aspecto será muy natural.
Las fracturas de los huesos que rodean el ojo (órbita) casi siempre son causadas por golpes que afectan esa área, si existen fracturas muy extensas el ojo tendrá un aspecto hundido y se verá más abajo con respecto al ojo contralateral. En la actualidad existen diversos tipos de implantes que se pueden colocar para reponer el área rota del hueso y mejorar el aspecto del paciente al colocar el ojo en su posición correcta.
La inflamación del saco lagrimal en la mayoría de los casos se debe a infecciones bacterianas y es el resultado de una obstrucción de la vía del drenaje lagrimal a ese nivel. La infección aguda debe tratarse con antibióticos pero la obstucción únicamente se resolverá al liberar la vía a través de una cirugía en cuanto el paciente ya no esté infectado.